Este muy buen disco del Ensamble es la
posibilidad de tener en una grabación la experiencia de un concierto de un
octeto que afianza un camino de búsqueda y atrevimiento, pero sobre todo, de
crecimiento y muy buena música. Las doce “subversiones” que componen el trabajo
transitan obras de Diego Schissi, Martín Sued, Rodrígo Ruiz Díaz y Andrés
Pilar, como así también composiciones de
Joe Pass, Egberto Gismonti y Silvestre Revueltas, y muy bellas canciones de
Jobim, Violeta Parra y Fernando Cabrera. Un todo para disfrutar en cada
ingrediente. Momentos en que el Ensamble suena a pleno y hasta podría decir
multiplicado en sus sonidos, y espacios de intimismo en que suena un grupo “chiquito”,
acariciante. Músicos jóvenes integran este Ensamble que tan bien mixtura la
música académica y popular, sin forzar nada, a puro estudio, arreglos y sentir
artístico. Lautaro Matute (guitarras y voz), Nicolás Rallis (guitarra y voz),
Joaquín Chibán (violín), Jenny Macaller (violoncello), Julián Galay (bajo
eléctrico), Nahuel Carfi (piano y voz), Agustín Lumerman (percusión), son el
Ensamble Chancho a Cuerda, que con estas Subversiones vuelven a permitirnos
gozar nuevas músicas y originales miradas sobre sonidos conocidos.(alesimonazzi)
Un disco donde encontramos los sonidos
del Brasil, esos que se han hecho parte de nuestra historia musical. Samba,
bossa, choro, candombe son lenguajes con los que Adriana Ríos nos permite
disfrutar de sus composiciones. Temas originales en castellano y portugués, algunos
compuestos junto a Agustín Pereyra Lucena (con quien comparte proyectos hace
años) y un tema con Roberto Menescal.Nacida en Brasil, residente desde los 7 años en Estados Unidos hasta los
17 en que un viaje en bicicleta de un año y el amor por un chaqueño la trajeron
a Argentina, Adriana transmite su pasión por la música, con una voz suave y
seductora. Los músicos que participan de Cadapaju completan un gran trabajo
artístico. Arreglos de Felipe Radicetti, Daniel Maza, Fabián Miodownik, Mono
Izarrualde, Fernando Martinez, Juan Cruz de Urquiza, Felipe, Norma Iovino,
Mariana Melero, Broder Bastos, Paulino Nunnes, entre otros. Rodrigo Aberastegui
aporta armonías originales y está a cargo de la guitarra y mandolina. Un disco
que hace referencia a la inocencia de nuestra tierra, a esos primeros sentires
que quedan cuando podemos despojarnos de las complicaciones. Canciones que con alegría
y mucho ritmo, nos acerca nueva música brasilera con toques de acá.
(alesimonazzi)